que se detengan las gotas de tu alma
y que la noche no se nuble
con las nubes de tus ojos.
Que no llueva,
ni fuera ni dentro,
que tu rostro no se moje,
que tu espíritu no se humedezca.
Que haya sol
y que no llueva,
que los días son para vivirse,
y no para ahogarse.
Si llueve, que escampe pronto,
que no te defina un chubasco,
toma la toalla de tu mano
y pásala por tus ojos mojados.
Y que deje de llover, que lloviendo
las estrellas no se aprecian,
ni la luna,
ni tu mirada clara y sincera.
Así que te deseo, una noche tierna,
un día suave y tranquilo,
un paseo por un parque de niños
y en todo ello... que no llueva.
FABO