La noche no se acaba con el partir de las estrellas,
así como tú presencia no se acaba con tu ausencia invisible.
La primavera sigue escondida en ese invierno,
latente como mariposa en capullo.
Presente en un mundo que no la nota,
porque no sabe cómo se ve lo importante.
El beso sigue en los labios,
como una bala cargada en la escopeta del abuelo,
olvidada en el ático
pero lista para la revolución.
La nube sigue en el cielo,
aunque dispersa,
esperando el momento de reunirse consigo misma
y volverse un manto blanco
que proyecta una sombra bajo de sí.
Yo sigo queriéndote,
con un latir normal, de pulso relajado.
Y tú no lo percibes,
y yo no lo menciono.
FABO
jueves, 9 de febrero de 2017
jueves, 12 de enero de 2017
Así lucía...
Todo se detiene a su paso, y con ella,
el espíritu se llena más allá de los sentidos.
Quizá es fuente de inspiración divina,
un instante de paraíso
iniciando en su mirada,
esperando en su vientre suave,
rompiendo en su pecho candente,
orando en sus labios eternos.
Muriendo en un suspiro profundo,
iniciando todo con una palabra.
He decidido quererla por siempre,
ella es y será en todo momento
razón, causa y pretexto
mediante el cual justifico mi locura,
otro día más, otro...
sin ella en mi cama, pero si en mi mente,
adornando mi destino incierto con la certeza de su ser.
Lucía bella con su sonrisa grande,
una ilusión tangible
como una ola que desaparece en la costa
iniciando con fuerza imparable,
agonizando en por beso, sólo uno... y no más.
FABO
el espíritu se llena más allá de los sentidos.
Quizá es fuente de inspiración divina,
un instante de paraíso
iniciando en su mirada,
esperando en su vientre suave,
rompiendo en su pecho candente,
orando en sus labios eternos.
Muriendo en un suspiro profundo,
iniciando todo con una palabra.
He decidido quererla por siempre,
ella es y será en todo momento
razón, causa y pretexto
mediante el cual justifico mi locura,
otro día más, otro...
sin ella en mi cama, pero si en mi mente,
adornando mi destino incierto con la certeza de su ser.
Lucía bella con su sonrisa grande,
una ilusión tangible
como una ola que desaparece en la costa
iniciando con fuerza imparable,
agonizando en por beso, sólo uno... y no más.
FABO
martes, 27 de diciembre de 2016
Tratado filosófico sobre el devenir romántico de un bohemio trasnochado.
Cuando lo noté, mis pasos iban de regreso,
la noche se hizo día.
Al fin comprendí que todo es uno
y por ende, siempre estaremos unidos.
Entonces... fui feliz.
FABO
lunes, 26 de diciembre de 2016
De esos...
¿Cuántos soles quedan por brillar
en un universo inmenso?,
tan inmenso como tu mirada,
tan brillantes como tus recuerdos.
Las notas vibran por los aires
dejando estelas de memorias
que aún no hemos vivido,
sin embargo, nos saben a pasado.
Somos felices, lo sé,
encerrados en nuestra prisión de ensueño,
con cadenas invisibles
hechas de monotonía.
Nos vamos vagando entre calles,
de un rumbo tan conocido
que por un momento nos fundimos
con el concreto,
con las fachadas,
tanto... que terminamos siendo la sombra de alguien más
y lo peor es que ni siquiera lo notamos.
Tal vez tú y yo eramos juntos,
...pero a la lejanía... ni tú eres tú
ni yo soy yo,
somos dos extraños de nosotros mismos.
Algunas noches me llega una tenue visión de mí,
y me despierto con el escalofrío de si te ocurrirá lo mismo.
Hoy dejaré la puerta abierta,
no para que entres,
sino para que salgas,
a ver si así termino de enloquecer
y me adapto a la sociedad.
Si decides quedarte
seguiré siendo un cuerdo soñador,
de esos que escriben poemas por las noches,
de esos que dicen palabras de amor al viento,
de esos que sin ti son todo,
de esos que sin ti son nada.
FABO
en un universo inmenso?,
tan inmenso como tu mirada,
tan brillantes como tus recuerdos.
Las notas vibran por los aires
dejando estelas de memorias
que aún no hemos vivido,
sin embargo, nos saben a pasado.
Somos felices, lo sé,
encerrados en nuestra prisión de ensueño,
con cadenas invisibles
hechas de monotonía.
Nos vamos vagando entre calles,
de un rumbo tan conocido
que por un momento nos fundimos
con el concreto,
con las fachadas,
tanto... que terminamos siendo la sombra de alguien más
y lo peor es que ni siquiera lo notamos.
Tal vez tú y yo eramos juntos,
...pero a la lejanía... ni tú eres tú
ni yo soy yo,
somos dos extraños de nosotros mismos.
Algunas noches me llega una tenue visión de mí,
y me despierto con el escalofrío de si te ocurrirá lo mismo.
Hoy dejaré la puerta abierta,
no para que entres,
sino para que salgas,
a ver si así termino de enloquecer
y me adapto a la sociedad.
Si decides quedarte
seguiré siendo un cuerdo soñador,
de esos que escriben poemas por las noches,
de esos que dicen palabras de amor al viento,
de esos que sin ti son todo,
de esos que sin ti son nada.
FABO
lunes, 7 de noviembre de 2016
Inconforme...
No me basta
con tomar tus manos por la mañana,
pues me dejan sintiendo su ausencia
hasta muy entrada la madrugada.
Las pocas horas que pienso en ti
me son insaboras,
me falta paladear
hasta los más ínfimos
y suculentos segundos de tu recuerdo.
Me es tan poco el alivio que me das,
éstas penas por ti me desahucian
y tu exiguamente me miras de reojo
para liberar un poco de agonía.
La sed de tus besos mata,
pues las pocas gotas que derramas
sobre mis labios secos
se sienten tortura, más que bendición.
La melodía de tu voz no me basta,
quisiera escucharla siempre y todo el tiempo,
en las conversaciones ajenas,
en la radio,
en mi mente.
Soy tan pobre de ti,
y tu tan opulenta millonaria,
si me dieras un poco más, solo un poco,
tal vez,
no estaría yo tan inconforme.
FABO
con tomar tus manos por la mañana,
pues me dejan sintiendo su ausencia
hasta muy entrada la madrugada.
Las pocas horas que pienso en ti
me son insaboras,
me falta paladear
hasta los más ínfimos
y suculentos segundos de tu recuerdo.
Me es tan poco el alivio que me das,
éstas penas por ti me desahucian
y tu exiguamente me miras de reojo
para liberar un poco de agonía.
La sed de tus besos mata,
pues las pocas gotas que derramas
sobre mis labios secos
se sienten tortura, más que bendición.
La melodía de tu voz no me basta,
quisiera escucharla siempre y todo el tiempo,
en las conversaciones ajenas,
en la radio,
en mi mente.
Soy tan pobre de ti,
y tu tan opulenta millonaria,
si me dieras un poco más, solo un poco,
tal vez,
no estaría yo tan inconforme.
FABO
jueves, 3 de noviembre de 2016
Te quiero como algo mío...
Te quiero como algo mío,
como mi mano derecha
que toma con fuerza la vida
y me ayuda a labrar el camino.
Como mi mano izquierda
que oculta sus deseos profundos,
que lleva sus secretos a la vista
y que sabe de todo sin decir nada.
Te quiero como algo mío,
como mis pies descalzos
que arden en las hirvientes arenas
de un desierto tan fino
que su arena parece no existir.
Como mis brazos extendidos
que sienten la lluvia caer
y se regocijan bailando,
cantando una muda melodía
que habla de tu cuerpo suave.
Te quiero como algo mío,
como mi rostro frío
por los vientos invernales,
tibio por el sol de mayo
y feliz por tus caricias.
Como mis ojos negros,
que te ven nocturna y desolada,
que te ven aunque no estés presente,
que se enamoran de tu sombra al pasar.
Te quiero como algo mío,
como mi pensamiento difuso
de tormenta a medio mar,
que agita los barcos con los sueños de antaño,
que suelta los relámpagos de tu recuerdo.
Como a mi alma,
la inmortal,
la divina,
la que se llena por tu sonrisa
y que se va tras de ti al marcharte.
Te quiero como algo mío,
como mis nostalgias
mis desdichas,
mis milagros
mis sonrisas
mi todo por ti
mi nada sin ti.
FABO
como mi mano derecha
que toma con fuerza la vida
y me ayuda a labrar el camino.
Como mi mano izquierda
que oculta sus deseos profundos,
que lleva sus secretos a la vista
y que sabe de todo sin decir nada.
Te quiero como algo mío,
como mis pies descalzos
que arden en las hirvientes arenas
de un desierto tan fino
que su arena parece no existir.
Como mis brazos extendidos
que sienten la lluvia caer
y se regocijan bailando,
cantando una muda melodía
que habla de tu cuerpo suave.
Te quiero como algo mío,
como mi rostro frío
por los vientos invernales,
tibio por el sol de mayo
y feliz por tus caricias.
Como mis ojos negros,
que te ven nocturna y desolada,
que te ven aunque no estés presente,
que se enamoran de tu sombra al pasar.
Te quiero como algo mío,
como mi pensamiento difuso
de tormenta a medio mar,
que agita los barcos con los sueños de antaño,
que suelta los relámpagos de tu recuerdo.
Como a mi alma,
la inmortal,
la divina,
la que se llena por tu sonrisa
y que se va tras de ti al marcharte.
Te quiero como algo mío,
como mis nostalgias
mis desdichas,
mis milagros
mis sonrisas
mi todo por ti
mi nada sin ti.
FABO
martes, 18 de octubre de 2016
Vamos a escaparnos...
Me gustan las playas
llenas de una arena fina y un sol interminable,
con su esencia salina que me sabe a tu piel
en cada bocanada de aire que respiro.
Me gustan los bosques tenues,
los de verdes óleos
con figuras amables en el día
y misteriosas por las noches,
bosques con pinos que bailan
al son del viento.
Me gustan las cuevas
llenas de tesoros inverosímiles,
donde resuena el eco de tus pensamientos,
donde brillan los minerales
con forma de caramelo,
donde el agua se esconde de sí misma.
Me gusta la pequeña ciudad
que se llena de papeles multicolores,
que desprende el aroma a historia;
la que no tiene fuerza cosmopolita
pero es inquebrantable en espíritu,
la que nos besa a pasos de luna.
Estoy cansado,
no sé si sentarme o salir volando
por esa ventana sin horizonte,
estoy inmerso en mi pecera
de cuatro paredes blancas.
Estoy cansado,
de tener mis sueños en el banquillo,
de no correr en todas direcciones
y de no tener respuestas
cuando me pregunto si soy feliz.
Por eso hoy es el momento,
dejemos todo
y unamos nuestras fuerzas
saquémonos del fango de la monotonía
llévame a donde tú quieras, pero vayámonos.
Ven....
Dame tu mano....
Vamos a escaparnos...
FABO
llenas de una arena fina y un sol interminable,
con su esencia salina que me sabe a tu piel
en cada bocanada de aire que respiro.
Me gustan los bosques tenues,
los de verdes óleos
con figuras amables en el día
y misteriosas por las noches,
bosques con pinos que bailan
al son del viento.
Me gustan las cuevas
llenas de tesoros inverosímiles,
donde resuena el eco de tus pensamientos,
donde brillan los minerales
con forma de caramelo,
donde el agua se esconde de sí misma.
Me gusta la pequeña ciudad
que se llena de papeles multicolores,
que desprende el aroma a historia;
la que no tiene fuerza cosmopolita
pero es inquebrantable en espíritu,
la que nos besa a pasos de luna.
Estoy cansado,
no sé si sentarme o salir volando
por esa ventana sin horizonte,
estoy inmerso en mi pecera
de cuatro paredes blancas.
Estoy cansado,
de tener mis sueños en el banquillo,
de no correr en todas direcciones
y de no tener respuestas
cuando me pregunto si soy feliz.
Por eso hoy es el momento,
dejemos todo
y unamos nuestras fuerzas
saquémonos del fango de la monotonía
llévame a donde tú quieras, pero vayámonos.
Ven....
Dame tu mano....
Vamos a escaparnos...
FABO
Suscribirse a:
Entradas (Atom)